La volatilidad de los precios que ha obstaculizado la utilidad de Bitcoin (BTC) y otras monedas digitales como medio de intercambio es algo que está siendo abordado por un tipo más reciente de cryptocurrency conocido como stablecoins.
Desde 2014, varias stablecoins han entrado en el mercado además de Tether (USDT), incluyendo Dai (DAI), USD Coin (USDC), True USD (USDT), Digix Gold, Havven’s Nomin, Paxos Standard, y Binance USD. (BUSD).
¿Qué es una stablecoin?
Ya sea el dólar estadounidense o Dogecoin, una moneda cumple importantes funciones como medio de intercambio y como depósito de valor. Por esta razón, se requiere la estabilidad de los precios. Los responsables políticos del país trabajan para mantener la estabilidad de los precios de la moneda nacional. En el comercio de divisas basadas en fiat, un cambio del 2% se considera un desprendimiento.
El uso de la criptomoneda es único. El precio de Bitcoin aumentó de menos de 6.000 dólares a más de 19.000 dólares entre mediados de noviembre y mediados de diciembre de 2017, pero luego cayó a menos de 7.000 dólares a principios de febrero de 2018. Comenzó en 5.000 dólares en marzo de 2020 y subió a 44.000 dólares en agosto de 2021. El valor de las criptomonedas puede fluctuar hasta un 10% en un solo día.
Estas importantes fluctuaciones no pueden considerarse estables. Tienen un mayor grado de volatilidad en comparación con instrumentos especulativos como los derivados. Esto lleva a preguntarse si las criptomonedas sirven para algo más que para la inversión especulativa.
Las stablecoins son monedas digitales que pretenden mantener un valor constante a la vez que son fáciles de usar. Las stablecoins ofrecen a los partidarios de las criptomonedas un valor estable sin el control centralizado de las monedas fiduciarias.
El potencial de una Stablecoin
La adopción de las criptomonedas como medio de intercambio para transacciones financieras y otros fines podría verse favorecida por la introducción de las stablecoins.
Las soluciones de seguros descentralizados, los contratos de derivados, los mercados de préstamos al consumidor y los mercados de predicción son todas aplicaciones potenciales para las stablecoins.
Estas aplicaciones no son las más adecuadas para las criptomonedas volátiles porque exponen a ambas partes a la posibilidad de pérdidas.