Así como nuestro planeta tiene diferentes interacciones en su naturaleza, también ocurre con las redes de blockchain. Cambiamos un ecosistema de fauna, flora y geofísica por otro repleto de interacciones virtuales que logran que una criptomoneda sea más o menos valiosa.
Entender cómo funciona el ecosistema de una red de blockchain ayuda a saber si merece la pena invertir en ella, facilita una predicción de futuro y es parte esencial del análisis técnico para no perder dinero. Descubre lo esencial de los ecosistemas de redes de blockchain y utiliza este conocimiento con sabiduría.
¿Qué es el ecosistema de una red de blockchain?
Un ecosistema de blockchain básicamente se trata del conjunto de empresas, compañías, profesionales, personas y servicios que utilizan dicha tecnología específica de blockchain para almacenar sus datos, transacciones y demás. Es decir, usuarios activos de la cadena de bloques.
Todos estos forman un conjunto entrelazado que le da el verdadero sentido a las blockchain. Cada vez que su actividad comercial necesita añadir los datos en bloques, pone en marcha toda la maquinaria de la red de blockchain. Esto es lo que genera el valor y hace que el engranaje siga rodando constantemente.
Cada criptomoneda o red de blockchain tiene su propio ecosistema, debido a que las diferentes empresas y servicios que la utilizan serán diferentes. Por ejemplo, empresas como Tesla o Paypal pueden utilizar Bitcoin, mientras que Microsoft y Deloitte optan por utilizar Ethereum.
El apoyo de dichas empresas, compañías y organizaciones en general ofrece un enfoque a futuro bien distinto. Las perspectivas en la escalabilidad de la red atrae a otras compañías para que la utilicen, que a la vez atrae a más mineros responsables de mantener viva y verificada la cadena de bloques.
Elementos que forman parte de un ecosistema blockchain
Una de las formas más fáciles de visualizar un ecosistema de blockchain es imaginar una pequeña ciudad creciente al estilo SimCity. Se comienza con apenas cuatro casas, unos comercios y algo de industria, para luego ir creciendo a medida que atraes nueva población a tus terrenos. A más crezca tu ciudad, exponencialmente será más valiosa y atraerá a más interesados en vivir en ella.
En esta ciudad hay diferentes elementos que trabajan interconectados unos con otros, ya que son dependientes tanto para que la cadena funcione adecuadamente como para su propia supervivencia.
Por un lado tenemos a las organizaciones que utilizan la tecnología blockchain en su beneficio. Aporta seguridad en sus transacciones y almacenamiento de datos, siendo los primeros en ofrecer la información para crear bloques en la cadena.
Luego están los mineros, los responsables de crear dichos bloques. A más mineros, mejor funcionará la blockchain, repercutiendo en la velocidad de creación y verificación. Además de ampliar aún más la descentralización de la red de blockchain.
También se encuentran los desarrolladores, los creadores de la red y de sus tokens. Son esenciales para ir añadiendo nuevas funcionalidades a la blockchain, depurar errores y actualizándola para evitar que pueda ser afectada por ataques maliciosos.
Por último también están los traders, que se encargan de comprar y vender los tokens de las diferentes redes para su beneficio propio. A pesar de que no participan activamente en el ecosistema, su impacto es fundamental: a más valor tenga una criptomoneda en el mercado de intercambio, más mineros atraerán para intentar conseguir sus recompensas.
Beneficios de tener un ecosistema de blockchain óptimo
En resumidas cuentas, si una blockchain cuenta con un ecosistema creciente y funcional, tendrá un buen puñado de beneficios para todos aquellos que forman parte de él. Entre estos beneficios se pueden destacar:
- El valor del token nativo o criptomoneda subirá, por lo que en los mercados de intercambios podrán venderse a mejor precio.
- La red es mucho más segura al contar con más nodos descentralizados trabajando en la creación y verificación de bloques de la cadena.
- Atraerá un mayor número de organizaciones que apostarán por este sistema para sus actividades financieras, asegurando la continuidad a futuro de la propia red.
- El equipo de desarrollo crecerá, ofreciendo una lluvia constante de actualizaciones y funcionalidades para mejorar los servicios a los usuarios de la blockchain.
- Mejorará la reputación de estos sistemas financieros descentralizados como alternativa a los bancos y modelos centralizados.
¿Cómo saber que una red blockchain tiene un buen ecosistema?
La mejor forma de conocer qué ecosistema tiene una blockchain es a través de aquellas compañías que hacen pública su apoyo y utilización de dicha red. Ya sea a través de campañas de marketing, apoyo a los desarrolladores u otras acciones que puedan incentivar la atracción de nuevas compañías (y mineros).
Tanto en las páginas web como en las redes sociales se puede encontrar mucha información respecto a estas empresas. Suelen haber artículos de blog, referencias, un listado de empresas que apoyan la red y otras formas de darse publicidad. Al fin y al cabo, a los desarrolles les interesan que se visualice el uso de su blockchain.
También se puede intuir el tipo de crecimiento en el valor de la criptomoneda. Si ha demostrado tener una curva ascendente, significa que cada vez hay más intensidad en la creación y verificación de bloques, por lo que el número de transacciones y acciones que requieren de validación es mayor.
En definitiva, el ecosistema de una red de blockchain es un elemento indispensable para analizar y estudiar antes de lanzarse a la compra de criptomonedas, en especial si la red es bastante reciente. A más apoyo tenga de organizaciones, más fácil será que el valor de su criptomoneda acabe multiplicándose a largo plazo.