Puntos clave
- BAT es un mecanismo basado en el blockchain que mide la cantidad de tiempo y atención que los consumidores de medios de comunicación pasan en los sitios web que utilizan Brave.
- Está diseñado para distribuir el dinero obtenido de la publicidad entre los anunciantes, los editores y los espectadores de los anuncios en línea.
- La intención es exponer a los lectores a un menor número de anuncios más específicamente dirigidos, todo ello sin comprometer su privacidad.
¿Qué es un Basic Attention Token (BAT)?
Brendan Eich, que también fue cofundador de Mozilla y Firefox, estableció BAT con la intención de utilizar la tecnología blockchain para mejorar la publicidad digital. Es un token nativo de Brave que está construido sobre Ethereum (ETH).
En el año 2022, el proyecto sigue en proceso de desarrollo, a pesar de que el navegador Brave ya es accesible, Brave tenía 54,5 millones de usuarios mensuales el 11 de febrero de 2022, además de 16 millones de usuarios diarios.
A medida que la tecnología blockchain y las monedas virtuales siguen ganando popularidad, las empresas están estudiando cómo pueden utilizarse para problemas más establecidos, como la publicidad y la navegación en línea.
Entendiendo el Basic Attention Token (BAT)
El navegador web Brave está integrado en la blockchain que utiliza Ethereum. Al comprar anuncios en la red Brave, los usuarios lo hacen con tokens BAT. Tanto los usuarios como los anunciantes y los editores pueden beneficiarse de su uso. Se basa en una de las ideas más importantes para las organizaciones que se ocupan de la publicidad digital, que es la atención de los usuarios.
BAT trabaja para hacer avanzar el estado de la publicidad digital, los usuarios, los editores y los anunciantes salen perdiendo con las tendencias actuales. Los usuarios son bombardeados constantemente con anuncios, rastreadores y un agresivo y potente malware.
Como resultado de que Google y Meta (antes Facebook) bajen el precio de los contenidos y se lleven una parte sustancial de los ingresos por publicidad, los ingresos por publicidad de los editores tradicionales han disminuido considerablemente. Cada año, los bots y el malware son responsables de mayores daños, y las plataformas tienen dificultades para mantener su credibilidad. Dado que las plataformas controlan los métodos de segmentación y la información, los anunciantes no pueden producir una cantidad suficiente de contenidos.