La iniciativa política de la Década Digital ha sido aprobada por el Parlamento Europeo. Este esfuerzo ayudará a las empresas y a los servicios públicos a digitalizar sus operaciones y desarrollará una “infraestructura paneuropea basada en blockchain”.
El recuento final fue de 529 votos a favor, 22 en contra y 25 personas no votaron
Los objetivos de la digitalización en el año 2030 se describen en la declaración política. En ella se especifican “proyectos multinacionales” a gran escala para cumplir los objetivos, como el desarrollo de una infraestructura de datos común, el refuerzo de la informática de alto rendimiento, el despliegue de corredores de Internet 5G y la inversión en soluciones de blockchain y web3. Estos son solo algunos de los objetivos que se alcanzarán.
La Infraestructura Europea de Servicios de Blockchain incluye a todos los países miembros de la Unión Europea, así como a Noruega, Liechtenstein y Ucrania como observadores. La Asociación Europea de Blockchain ya está trabajando intensamente en el desarrollo de la EBSI, según un portavoz de la Comisión de la Unión Europea que habló con The Block.
Si se aprueba el expediente de la Década Digital, en el futuro podría dar lugar a más financiación para la EBSI.
En 2018, la Comisión Europea creó la Asociación Europea de Blockchain y el Instituto Europeo de Blockchain Estándar (ESBI) con el objetivo de desarrollar y prestar servicios públicos basados en blockchain en toda la Unión Europea (UE).
Un funcionario de la Comisión de la UE declaró que el ESBI proporciona apoyo para la prestación de servicios públicos a través de las fronteras nacionales con tecnología respetuosa con el medio ambiente. Se utiliza la tecnología blockchain y la gobernanza de la UE se da a través de la EBP.
Los recursos de financiación existentes en la UE, como el fondo de préstamos y subvenciones de 724.000 millones de euros del Mecanismo de Recuperación y Recuperación, pueden combinarse con las contribuciones de muchos países para financiar iniciativas multinacionales. Los proyectos también pueden recibir financiación de los distintos Estados miembros de la UE, así como de empresas privadas.