ERC20R y ERC721R fueron concebidos inicialmente por Kaili Wang, Qinchen Wang y Dan Boneh, investigadores de Stanford.
Los estándares de tokens pueden considerarse como interfaces o conjuntos de estándares a los que hay que adherirse para que los contratos inteligentes sean compatibles con las aplicaciones descentralizadas.
ERC20 y ERC721 se ampliarían con nuevos estándares de tokens, que también revertirían las transacciones fraudulentas.
Según Wang, los hacks significativos son robos con pruebas sustanciales.
Ojalá hubiera una forma de poner fin a estos robos
¿Tokens basados en Ethereum que pueden ser revertidos?
Los tokens y los contratos de gobierno se denominan ERC20R y ERC721R respectivamente.
Según el concepto, un quórum descentralizado de jueces vota para congelar y anular las transacciones fraudulentas.
Una víctima cuyos fondos hayan sido robados o pirateados puede presentar una solicitud de congelación de sus cuentas junto con la documentación justificativa.
Cuando se solicita la congelación, la víctima es responsable de pagar los salarios de los jueces dispersos. La víctima tiene la posibilidad de adjuntar gastos prioritarios a un caso para que se pueda tramitar más rápidamente gracias a la propuesta.
Si los jueces descentralizados deciden a favor de la víctima, los fondos pueden ser bloqueados y la fiscalía puede continuar con el juicio.
Ambas partes -la víctima y el hacker- tienen la oportunidad de presentar sus pruebas a los jueces descentralizados, que luego emitirán sus votos para determinar el resultado. En función del resultado de la votación, se devuelven los fondos a la víctima o se rechaza la solicitud.
La estrategia de los investigadores ha sido cuestionada por una parte importante de la comunidad de criptomonedas.