Han pasado casi 12 años desde que se minó el primer Bitcoin. Cuando el misterioso Satoshi Nakamoto diseñó la moneda digital descentralizada, lo hizo de forma que no se pudieran minar más de 21 millones de Bitcoins. Probablemente se hizo, al menos en parte, para controlar la oferta y suavizar las futuras fluctuaciones de precios.
No obstante, esta semana se han extraído 18,9 millones de Bitcoins, es decir, el 90% del total.
Además, la red Bitcoin se diseñó de tal manera que la última moneda no se acuñará hasta el año 2140. Así que mientras el primer 90% se creó en menos de 12 años, el 10% restante tardará casi 120 años en llegar.
También hay que tener en cuenta que se estima que el 20 por ciento de todos los Bitcoins que ya han sido minados se han perdido para siempre. Las razones son múltiples: pérdida de contraseñas, extravío de discos duros, muerte, etc. En cualquier caso, una vez que se pierden, no se pueden recuperar, lo que teóricamente hace que las monedas restantes en circulación sean aún más valiosas.
Eso suponiendo, por supuesto, que los Bitcoins sigan siendo percibidos como valiosos. Han ocurrido tantas cosas en este ámbito en sólo 12 años que es casi imposible predecir con certeza cómo será el mercado dentro de 100 años.