A pesar de su meteórico ascenso, todavía hay quienes piensan que las criptomonedas en todas sus formas son una estafa. En esa lista de escépticos hay un nombre sorprendente: Jackson Palmer, el cocreador de Dogecoin.
El ingeniero de software Palmer, que creó Dogecoin junto a Billy Markus en 2013 como una broma basada en el meme “doge”, ha estado ausente de Twitter desde que hizo su cuenta privada en 2019. Sin embargo, ha vuelto para arremeter contra las criptodivisas por ser una forma de enriquecerse para los ricos, y por ser poco diferentes del “sistema financiero centralizado existente que supuestamente se proponen reemplazar.”
“Después de años de estudiarla, creo que la criptodivisa es una tecnología inherentemente derechista e hipercapitalista construida principalmente para amplificar la riqueza de sus proponentes a través de una combinación de evasión de impuestos, disminución de la supervisión regulatoria y escasez artificialmente impuesta”, tuiteó el miércoles.
Palmer continuó diciendo que las criptomonedas “están controladas por un poderoso cártel de figuras adineradas”, y que explotan la desesperación de los financieramente desesperados e ingenuos.
“La explotación financiera existía, sin duda, antes de las criptomonedas, pero éstas se han construido casi a propósito para que el embudo de la especulación sea más eficiente para los de arriba y menos salvaguardado para los vulnerables”, añadió.
Palmer ya ha hablado en contra de la industria que ayudó a crear. En un artículo de Vice de 2017, escribió “algo está muy mal” cuando Dogecoin alcanzó una capitalización de mercado de 2.000 millones de dólares. Palmer también reveló que terminó cualquier participación en el cripto en 2015.
Aunque Dogecoin ha caído alrededor de un 72% desde que alcanzó su máximo histórico en mayo, todavía tiene una capitalización de mercado de 25.000 millones de dólares, lo que la convierte en una de las diez criptomonedas más importantes según su valor de mercado.
El co-creador de Doge, Billy Markus, tuiteó que los puntos de Palmer son válidos. Esta podría ser la última vez que escuchemos la opinión de Palmer sobre el tema. “A menudo me preguntan si ‘volveré a la criptomoneda’ o si comenzaré a compartir regularmente mis pensamientos sobre el tema de nuevo. Mi respuesta es un ‘no’ de todo corazón”, tuiteó.